4. El primer beso realmente cuenta?
Varios estudios han señalado que este mecanismo se desarrolla con más intensidad en las mujeres y que factores como problemas dentales, la forma de la boca, el aliento y las habilidades para hacer de un beso un momento placentero que provoque reacciones químicas a nivel cerebral, inciden directamente en la elección del compañero a partir del primer momento en el que la pareja se besa. Nada que no supiéramos, pero es 100% real.
3. El Síndrome del besador compulsivo realmente existe?
Continuando en la misma línea de datos disparatados sobre los besos, ¿alguna vez escuchaste acerca del “Síndrome del besador compulsivo”? Bueno, permíteme contarte que es algo real y que por ende, existe: básicamente, son personas adictas a los besos. Se trata de un peculiar tipo de trastorno obsesivo compulsivo.