El hijo de Vicente Fernández ha sido asesorado muy bien por su familia para manejar la controversia y tal lo demostró cuando la prensa le preguntó si es cierto el problema de alcoholismo de su padre y si su abuelo había tomado medidas en el asunto.
El joven de 25 años de edad desmintió dicha situación afirmando que su padre no toma, pero que los medios de comunicación se han hecho expertos en virilizar esa información. Añadió, además, que Alejandro no ha estado bajo ningún tratamiento de rehabilitación.
En otras noticias, su álbum debut “Sigue la Dinastía” es una producción que mezcla lo mejor de la tradición del género mexicano.