Tras cuatro años de su diagnóstico, Bettina Salazar, reveló que pese al terrible padecimiento que ha vivido se ha mantenido fuerte, motivo por el cual no ha desertado como lo han hecho otros.
No obstante, confesó que si hubo momentos en los que casi se tumba y en los que pensó que perdería la vida.
La holgazana afirmó que tras el sufrimiento que le ha causado esta enfermedad lo único que desea es vivir, pues piensa en el bienestar de su única hija.