La relación que tuvieron el cantante y su progenitora, sin lugar a dudas fue inquebrantable. Y es que el español, al alcanzar la fama, era consciente de que tenía que mostrarle su amor, mediante uno de sus temas.
Y así lo hizo. Su promesa la cumplió con el éxito ‘Perdóname’. Fue en enero de 1982, Camilo Sesto estaba en plena cúspide de su carrera musical, cuando se presentó en el auditorio de Palma de Mallorca, el lugar perfecto para llevar a su mamá para que lo escuchase en vivo.
Allí vestido de camisa blanca y pantalón negro. Empezó así su presentación: “Te voy a dedicar una de mis mejores canciones para ti solita ‘Perdóname’”.