Este Domingo, el mundo de la música ranchera no solo en méxico sino en el mundo entero se vistió de luto con la partida del gran Chente Fernández.
Tras su desceso, se llevó a cabo un bien merecido homenaje de cuerpo presente en la Arena VFG en Gudalajara Jalisco, donde aproximadamente 7,000 mil fanáticos acompañaron a la familia del “Charro de Huentitán” a darle el último adiós.
Durante el homenaje, los fanáticos tuvieron la oportunidad de acercarse a unos metros del féretro para despedirse del cantante, así como de cantar canciones rancheras en la compañía de mariachis, quienes se encargaron de cantar diversos éxitos del cantante.
El féretro, que fue adornado con un sombrero de charro del cantante, fue colocado en la tarima del coliseo y estuvo presente durante toda la noche, la primera guardia del féretro la tuvieron los hijos del cantante: Alejandro Fernández, Gerardo y Vicente Fernández Jr., quienes al escuchar al mariachi que despidió a su padre aplaudieron.
El momento más desgarrador de la noche, fue cuando doña Cuquita llegó al feretro donde descansan los restos de su esposo, y al fondo apareció Alejandro Fernández, para cantar ‘Amor de los dos’, canción con la que poco a poco se acercó a su madre para abrazarla, y ella rompió en llanto.
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