Todo comenzó por un audio presentado por Gustavo Adolfo Infante en el programa Sale el Sol, donde se le escuchaba a la actriz írsele con todo a su colega Lucero, información que fue acompañada por un comentario del comunicador, en el que la señalaba de conflictiva y desquiciada.
Esto causó que Gabriela Spanic interpusiera una querella contra el conductor, acusándolo de daño moral. Por esto, ayer se vieron las caras en el tribunal superior de justicia del Distrito Federal, en México.
A la salida de la audiencia, Gaby explicó que se trató sólo del desahogo de pruebas, especificando que al principio se le cuestionó sobre la posibilidad de un acuerdo, que ella aceptaría sí y sólo sí Infante emitía una disculpa pública, a la cual se negó.