El heredero universal del cantante mexicano, se alzó una vez más en la batalla por el legado de Juan Gabriel. Todo comenzó cuando Joao Gabriel Rosales en Mayo de 2017 demandó a Iván Salas, a su esposa y a los padres de ésta por supuesto fraude en el proceso de adjudicación de la casa que el heredero y su mujer, habitaban en Florida.
El joven que se autodominó hijo biológico del Divo de Juarez, alegaba que Iván y su esposa Simona Aguilera Jacman manipularon la firma del cantante para obtener dicha propiedad, sin conocimiento del mismo, aprovechando la función de notario público de los padres de Simona.