La ex asistente y amiga del Príncipe de la Canción respalda lo que reveló Paulina Mondragón, en referencia a la decadencia física que sufrió el músico en los últimos años de su vida.
Laura Núñez , incondicional del cantante, confirmó que éste no sólo tuvo la sospecha de ser víctima de envenenamiento por parte de su esposa Sara Salazar, sino que lo corroboró a través de unos análisis de sangre que se realizó en Miami y que trajo consigo a México, cuando inició su tratamiento en el Instituto Nacional de Nutrición.
Explicó que en México, el artista no se realizó exámenes toxicológicos, al tiempo que descartó que en ese momento el artista padeciera de falta de nutrientes, aun y cuando se hallaron en su organismo agentes extraños e indicó que Sarita Sosa debe tener los estudios que reflejan que sustancias estaban causándole mal a su padre.